Durante el verano de 2018 habíamos planificado un viaje a Bélgica para conocer su capital y las principales ciudades flamencas: la típicas de cualquier viaje turístico, Amberes, Gante y Brujas; y las menos típicas, Malinas y Lovaina. Para ello, nos pusimos manos a la obra y empezamos a enumerar qué cosas necesitábamos para llevar a cabo este viaje. En primer lugar, necesitábamos volar a Bélgica. Después de hacer un seguimiento de las principales compañías aéreas que operan en el país durante bastantes días, si lo que pretendíamos era un vuelo barato, estaba claro que volaríamos con Ryanair. Que conste que nosotros no hemos tenido ningún problema, ni de demora, ni de pérdida o sobrepeso de equipaje. La única pega que le vemos es la estrechez de los asientos, pero como el vuelo durará un par de horas como mucho, pues nos apañamos. Vimos que los días más baratos para volar del mes de septiembre eran el 25 para el vuelo de ida (aeropuerto de Charleroi) y el 3 de octubre para el vuelo de vuelta (aeropuerto de Zaventem). El primer dista de la capital belga unos sesenta kilómetros, mientras que el segundo, de reciente creación, está separado de Bruselas unos doce kilómetros. Vistos los precios, decidimos reservar a finales de agosto, costándonos el vuelo de ida 55,98 euros, saliendo de Madrid a las 06:05 horas y aterrizando en Charleroi a las 08:25 horas. El vuelo de vuelta salía del aeropuerto de Zaventem a las 20:10 horas y llegada a Madrid a las 22:40 horas, por un precio de 61,97 euros. En estas cantidades están incluidas las tasas que cobra la compañía por reservar asiento y por pagar con tarjeta bancaria. El horario, tanto de la ida como de la vuelta, se acomodaba a nuestras exigencias personales: llegar lo más temprano posible al destina para aprovechar al máximo ese día, y regresar lo más tarde posible para volver a disfrutar el mayor número posible de horas de ese último día. Tanto la ida al aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid-Barajas como el regreso de este lo teníamos cubierto con nuestro hijo Carlos actuando como taxista.